miércoles, 28 de mayo de 2008

Lo que no cambia

Hay cosas que no cambian nunca. Este finde me voy a ver a mis padres y a celebrar el cumple de mi sobrino. Un año ya, parece mentira!. El caso es que hoy era el último día que podía quedar con mi niño, porque mañana empieza nuevo horario y ya no será tan fácil. Aunque tampoco imposible, pero bueno. Total, que cuando me ha traído a casa yo no tenía ninguna prisa por despedirme, puesto que no sé si mañana nos veremos o no. Y si no nos vemos no sé si quedaremos la semana que viene algún día o hasta el viernes nada.
Pero él tenía prisa por irse, quería mirar unas cosas del trabajo y quería aprovechar. Entiendo que tenga cosas que hacer y quiera irse, pero a mí se me para el tiempo con él. Ya nada existe y no tengo prisa por volver al mundo real.

Quizá ese es mi problema, que yo vivo en una nube con él, y él tiene los pies en la tierra. Que para mí no existe nada más que él, y él tiene un momento para cada cosa.

Y supongo que su postura es la correcta, o al menos la de no volverte loca.

Pero ya no puedo hacer nada por cambiar. Es mi forma de ser, como lo es la suya. Hay veces que me da rabia o me deprime que no haga lo que yo espero, lo que yo haría en su lugar, pero cada uno es como es, no puedes exigir a alguien que se porte de una manera que no siente.
Por eso se repiten siempre las mismas situaciones. Por eso hay cosas que no cambian.

Como tampoco cambian mis ganas de verle, de abrazarle, de quedarme pegada a él mientras me rodean sus brazos y me da besos en la mejilla. No cambian las risas cuando me coge de la cintura por detrás y empieza a darme vueltas como loco.

No cambia su sonrisa, esa capaz de iluminar culquier sitio donde está. No cambian las ganas de decirle te quiero aunque él nunca me conteste. No cambian los latidos de mi corazón cada vez que me dice algo bonito, algo que no espero.

Puede que solo cambie lo que siento por él, porque cada vez es más grande. Aunque a veces me desespere, me den ganas de matarle o de que lo aguante su madre. Pero se me pasa pronto y como si fuera un imán me atrae y no puedo dejar de abrazarle o acariciarle.

Estos días estoy liada en el trabajo, salgo tarde y vengo tan cansada que lo último que quiero es ponerme al ordenador, así que ya perdonaréis mis ausencias.
Gracias por seguir por aquí, y ya sé que tengo pendientes unos memes por hacer, pero prometo que un día de estos me pongo vale?

miércoles, 21 de mayo de 2008

Bodas, bautizos y comuniones

Hoy que me he estado poniendo al día de vuestros blogs he leído el de Minipiniwini y me ha dado una idea sobre lo que escribir. Mejor dicho, podía enrrollarme tanto en su comentario que no me ha parecido bien, y prefiero escribirlo aquí.

Ella está superfeliz porque ha ido con su novio a una celebración familiar. (qué bien suena eh Mini? )

Yo me pongo a pensar en cuándo me tocará a mi esa situación. Por una parte no tengo prisa ni lo echo de menos porque la verdad que no me va mucho el rollo familiar, ya me cuesta con la mía imaginaros con la de los demás.

Pero por otra me gustaría sentir esa sensación de saber que soy su pareja, que me presenta a la gente que quiere y que le importa, que se siente orgulloso de que nos vean juntos. Me gustaría oirle decir que soy su novia, su chica, lo que quiera. Me gustaría ver nuestros nombres juntos en el sobre.

Recuerdo que el año pasado se casó una prima suya, y fue a la boda con ella. Yo me sentí fatal, porque me hubiera gustado estar allí, más que por la boda por todo lo que representa. Me hubiese puesto bien guapa para que presumiera de novia.

Pero bueno, eso no pasará. Sigue diciendo que estamos bien así, parece que el otro día quiso decir algo como que a veces pensaba en serlo, pero...
Creo que le da miedo que se rompa lo que tenemos. Que si le pone nombre o cambiamos de situación, las cosas irán mal. Le da miedo tener obligaciones. Y no sabe que la situación no iba a cambiar tanto, aunque ya se lo haya explicado.

jueves, 15 de mayo de 2008

Cumpleaños feliz

La semana pasada fue el cumpleaños de mi niño y quise que tuviese un día muy especial.

Yo me había cogido fiesta hace tiempo porque no sabía si este día estaría trabajando o si iría en turno de mañana o de tarde, así que por si acaso yo fiesta, para no perderme nada.

Preparé un picnic para ir a la playa, vino a buscarme y nos fuimos a comer a nuestro sitio preferido. Estaba supercontento, disfrutando de la comida, de las vistas, de todo.

Para postre como no podía llevar una tarta le llevé un muffin de chocolate, y le dije que se diera la vuelta un momento que tenía una sorpresa. Le dejé la caja con su regalo encima de la manta de picnic y puse una vela en el muffin, pero como hacía tanto aire se apagaba. Me costó lo mío encenderla y cuando por fin le digo que ya puede mirar se apaga otra vez.

- Vaya, es que era para que pidieras un deseo, ahora no podrás.

- Ya sabes que yo no soy muy dado a decir estas cosas, pero mi deseo es estar aquí ahora contigo.
Le encantó la sorpresa, el regalo y la postal que le escribí.

No dejaba de abrazarme, de darme las gracias, de darme besos.

Nos echamos una siesta allí mismo, estábamos cansados y después nos fuimos a pasear un rato. Me invitó al cine.

Fue un día realmente especial, y me alegra haber sido yo la que estuviese a su lado.

martes, 13 de mayo de 2008

Como cangrejos ermitaños

Así pasamos el finde, sin salir de casa. La culpa la tuvo la lluvia, que aunque sé que hace mucha falta a mí me deprime un montón.

Pero esta vez fue diferente, no me importó. Desde el viernes después de comer hasta el domingo por la tarde estuvimos viendo la tele, comiendo de todo un poco o un mucho, mimándonos.

En fin, todo lo que puedes hacer con la persona que más quieres en este mundo. Disfrutar, reír y ser tan feliz que se te olvida todo lo demás.

El siempre hace que me olvide de todo, y la verdad que estoy enganchada a esa sensación. Lo necesito. Necesito estar con él y olvidarme de las pequeñas cosas que hacen que me ponga nerviosa, que me deprima.

El hace que todo un fin de semana de lluvia y tormentas sea como el más radiante.

martes, 6 de mayo de 2008

Sitios así de bonitos...



Son los que vimos durante estos dos días que estuvimos fuera.

Habíamos pensado pasar todo el finde fuera ya que no teníamos puente, pero al final nos fuimos el sábado por la mañana y volvimos el domingo comiéndonos una hora y media de retención que casi acaba conmigo. Entre el calor y el estómago que llevaba tan revuelto de todo el alcohol que había tomado la noche anterior casi me muero. Y es que una ya no está acostumbrada a salir hasta que se hace de día y llegar al hotel con los zapatos en la mano porque ya no puede más. Y no es por falta de ganas, pero las cosas van como van.

Así que en general y aunque trabajara el viernes ha sido un puente genial. He visto sitios preciosos, que me apetecía mucho conocer y por fin he podido ir con la mejor compañía.

Y no todo ha sido bonito y maravilloso, hubo algo que me amargó un poco la noche, pero decidí pasar de todo y pasármelo bien, que para un día que salgo no me voy a cabrear. Y tampoco quiero contarlo ahora, quizá otro día.

Hoy solo quiero contar y quedarme con esas sonrisas, esas caricias y esa forma de mirarme fijamente que hace que me ponga nerviosa, porque no suele hacerlo. Que hace que le pregunte, qué miras? y me conteste Qué pasa, no puedo mirar? Con los planes y los abrazos y con todos los momentos compartidos. Con sus palabras resonando en mi cabeza, tienes bonitos ojos.

Para qué quiero agobiarme pensando que las cosas no son como suelen ser. No tengo a alguien con quien compartir mis momentos? No tengo a alguien que me hace reir, sentirme en el cielo y olvidarme del mundo?

Tengo que aprender que las cosas no son siempre igual, que no todas las personas son iguales ni actúan de la misma manera. Que todos tenemos nuestras manías y nuestra forma de pensar, y que si aceptas a alguien lo aceptas como es, sin más. Con sus rarezas, sus manías, su forma de pensar y de ver la vida. Aunque haya cosas que no entiendas, que no seas capaz de asimilar porque no son como tú o la mayoría de la gente las piensa.

Así que me quedaré con una frase que él me dijo:

- Entonces esto no es real?

jueves, 1 de mayo de 2008

De vuelta

Por fin vuelvo por el mundo bloggeril, pero es que he estado liada estos días.

El domingo vino mi hermana con el peque, y como es un terremoto pues imposible ponerse un rato al ordenador. Así que aparte de pasármelo muy bien, he vuelto a convencerme, aunque lo tuviese ya clarísimo, que los niños muy monos pero para sus padres, jajaja. Yo no puedo con uno de esos.
Si lo tendré claro desde siempre que cuando jugaba de pequeña con mi hermana y las muñecas yo siempre era la tía, nunca la madre. Así que el instinto maternal en mí nunca ha existido.


Hoy he ido de excursión con mi niño por un camino al lado de unas playas preciosas, lo hemos pasado genial.
A veces me agobio un poco pensando en que nunca salimos por la noche, que estoy un poco cansada de preparar cenas especiales cada viernes, de que cada vez que hacemos planes para pasar un finde fuera pasa algo o le surge alguna cosa que hace que tengamos que cancelarlo. Y me digo, se acabó, me voy con quien sea. Pero aún no he terminado de decirme estas palabras cuando me doy cuenta de que con quien realmente me divierto y con quien realmente quiero hacer todas esas cosas es con él. Y luego me dice cualquier cosa y me sonríe y se me olvida todo. Qué le vamos a hacer, el amor es lo que tiene. O la vida.

Me han ayudado mucho vuestros comentarios al anterior post. Ya sé que la vida es así, que tenemos que pasar momentos malos para apreciar los buenos, pero a veces no ves más allá de lo que quieres ver y es muy poco.

Llega el finde, mañana trabajo, pero pienso disfrutar de los días de fiesta.