martes, 28 de julio de 2009

En el Monasterio de Piedra

Este finde nos fuimos a Zaragoza. Llegamos el viernes por la tarde, estuvimos un rato en casa y luego nos fuimos a cenar y a tomar algo.

Al día siguiente estuvimos de tiendas, aunque al final no compramos nada, fuimos a tomar vermut, a beber granizado de chocolate, más tiendas, y por la tarde volvimos a casa para descansar un rato. Nos encontramos con mi hermano en casa y, como ya lo ha visto unas cuantas veces porque casi siempre coincidimos, me acompañó a ver el piso que se había comprado. Parece que ha perdido la vergüenza con él. Algo es algo.
Luego yo me pasé a casa de mi hermana para ver un rato a mi sobrino, y él ya se quedó durmiendo un rato. Ya hubiese sido mucho tanta visita familiar jajaja.

Por la noche fuimos a cenar a un restaurante que me había recomendado mi hermana, muy mono, y sobre todo cenamos genial.
Después nos fuimos a la zona de las playas que hicieron el año pasado, actúaba Wally López y nos apetecía fiesta, así que allí estuvimos disfrutando como enanos.

Al día siguiente nos levantamos tarde y nos fuimos al Monasterio de Piedra. Con el calor que hacía el domingo era un sitio donde estar algo frescos, entre las sombras y el agua al menos te podías remojar y refrescar.

Lo pasamos genial, y como siempre se nos hizo corto. Y es que el finde se pasa volando!

Os dejo unas fotos del Monasterio de Piedra, a ver si os animáis y vais a visitarlo que es precioso.


Cascada caprichosa






















El lago del espejo
















Los Vadillos

jueves, 23 de julio de 2009

Semana tranquila

Esta ha sido una semana tranquila, excepto en el trabajo para variar. Pero de eso intento olvidarme en cuanto salgo.

Mi amiga está de vacaciones en Berlín toda la semana, así que estoy sola en casa, y la verdad que se está de coña, de vez en cuando se agradece tener la casa para tí sola.

Con mi niño muy bien, hemos quedado todos los días para hacer lo de siempre, y genial.
Mañana nos vamos a Zaragoza aprovechando que tenemos una casa libre, así el sábado iremos al Monasterio de Piedra, que él no lo conoce y le gustará seguro. La verdad que es precioso, y ahora con el calor que hace es una buena opción para pasar el día, por lo menos te puedes refrescar un poco por las cascadas.

Y en este momento estoy muerta de calor así que voy a quitarme de delante de la pantalla que aún me acalora más y voy a tomarme una shandy bien fría.

miércoles, 15 de julio de 2009

Doce días en veinte líneas

He estado en Zaragoza, he comido tapas y bebido granizado de chocolate.
Vinieron mi hermana y mi sobrino.
Cambió el tiempo, llovió e hizo frío.
Fuimos a Peñíscola, comimos como cerdas y nos rebozamos en la arena.
Jugamos en el agua con el pequeñín y nos reímos mucho.
Eché de menos a mi niño.
No pudimos ir a la playa ni un día más.
Se me caía la baba con mi sobrino.
Seguía echando de menos a mi niño muchísimo.
Se marcharon mi hermana y el peque.
Vi a mi niño y discutimos.
Fuimos al concierto de Amaral.
Pasamos la noche y el día siguiente en Barcelona.
Hicimos el amor por la mañana con muchas ganas.
Vimos una peli en 3D, comimos en una de nuestras pizzerías favoritas y me compré el vestido para una boda que tengo en agosto.
Hicimos el amor apasionadamente y como locos.
Descansamos en casa todo el domingo.
Hemos ido a la playa.
Y he echado de menos a mi otro niño.

miércoles, 1 de julio de 2009

No soy un ángel

La cuestión no es lo que nos valoramos nosotros mismos, sino lo que valoramos a la persona que queremos.
Tal vez yo no sea tan perfecta, tan angelito, tan fácil de aguantar cada día. Tal vez yo tampoco soy un buen partido para otra persona, porque tal vez esa persona también merezca algo mejor.

Valoro a la persona que amo por encima de todo. No es perfecto, es más a veces es inaguantable. No es todo lo cariñoso que a mí me gustaría, ni todo lo apasionado. Es cabezón, obsesivo y algo egoísta. Porqué le quiero entonces? Quizá porque nos parecemos más de lo que parece.
Igual yo me paso de cariñosa y apasionada para su gusto y tampoco le gusta. También soy bastante cabezona, obsesiva, y egoísta. Porque cuando quiero algo hago lo que sea por tenerlo.
Puede que mi actitud entonces no sea la mejor, puesto que estoy empeñada en tenerle.

No soy un ángel. Como tampoco lo es él.

Pero hay momentos que lo valen todo, que hacen que merezca la pena seguir adelante, intentarlo. Que hay que aprovechar porque la vida es corta, y nunca sabemos hasta cuándo estaremos aquí.

Y tengo muchos momentos guardados, muchos momentos que recordar y seguro que muchos por vivir.
Como el de esta tarde, bañándonos en la playa al atardecer, en una cala que no había nadie, incluso ha salido el arco iris.

Le he abrazado y me ha dicho no te vayas este finde.

- Sí, que tienes que hacer lo de la presentación.
- Que no, mejor nos vamos al chino y a la playa, o de excursión...
- No, que tienes que hacer eso.
- Además si viene tu hermana la semana que viene no nos veremos hasta el viernes, son muchos días.
- Bueno, pero así descansamos de vernos, no necesitabas espacio?
- Te lo guardas todo eh?

Mientras estábamos en el agua le he rodeado con mis brazos y mis piernas, y me ha dicho

- Te echaré de menos
- Yo también a tí
- No te vayas


Pero sí que me iré, porque tengo que ir a Zaragoza, porque me apetece, y porque realmente si no, no hará lo que tiene que hacer. Quizá no nos vayan mal esos días sin vernos. Como le he dicho, así me echarás de menos.

En el fondo, no puede vivir sin mí.